
Un álbum esencial. Civilis desafía las etiquetas, usando la historia del metal para forjar un sonido progresivo, emocionalmente devastador y con una narrativa conceptual de alto calibre.

Civilis no ha lanzado un simple disco de metal; ha orquestado una experiencia cinematográfica en siete actos que funciona como una brutal continuación. Sleeping Prophets – Chapter 2 no solo es un título; es la premisa de una odisea épica donde el protagonista—el profeta que ha despertado—recorre el espectro del dolor, la furia y la autodeterminación, utilizando cada subgénero del metal como un capítulo temático.
Acto I: La Fragilidad y el Pacto
El álbum comienza con una decisión estilística audaz y arriesgada. “Dying By Will” es una inesperada balada rock que no es romántica, sino un sombrío pacto de autodestrucción . Es la calma y la rendición que establece el profundo nivel emocional de la obra.
El asalto arranca con “Human Infection”, un potente homenaje al Heavy Metal Clásico que, líricamente, confronta la paranoia y la locura con riffs majestuosos.
Acto II: La Épica de la Soledad Elegida
El concepto se complejiza en el centro del álbum. “The Curse” lleva el sonido al Metal Melódico/Oscuro, convirtiéndose en una épica de supervivencia colectiva . Sin embargo, el protagonista rechaza esa senda.
“Path Of Stones” —un glorioso retorno al Heavy Clásico que incluye un gran solo de guitarra— es una declaración de autosuficiencia radical. El narrador se enorgullece de su podredumbre y construye su “fortaleza eterna” en soledad, eligiendo su propio destino, por oscuro que sea.
Acto III: El Colapso y la Catarsis Final
La arrogancia del profeta solitario se desmorona en “Empty Spaces”. La banda mira al futuro con un Metal Moderno, lento y poderoso. Es el punto de máxima tensión, donde el narrador confiesa su vulnerabilidad, atrapado en una espiral de dolor.
Esta tensión explota en “The Rage”. Este es el peak de la agresión: poder puro en voz y ritmo, el Thrash sin concesiones. La rabia se personifica como una fuerza , purificando al protagonista a través de la violencia.

Finalmente, “Stand In Hell” sella la obra con una “patada en la cara”, una mezcla de Thrash y Heavy Metal. La canción es el cierre filosófico de Chapter 2. No es solo agresión, sino una lección: “Rompe estas cadenas, bloquea la debilidad de tu alma.,” porque “La caída no es para siempre” y “Ninguna derrota será tan grande.” El profeta, ahora completamente despierto, no busca el cielo; elige pararse en el infierno como la máxima expresión de una voluntad indomable.
Conclusión: Civilis ha creado un trabajo conceptual impecable. Sleeping Prophets – Chapter 2 es un álbum que desafía las etiquetas, demostrando que la maestría técnica del metal puede ser un vehículo para una narrativa profunda y universal. Es una obra que exige ser escuchada de principio a fin, consolidando a Civilis como una fuerza creativa esencial en el panorama del metal actual. Absolutamente recomendado.
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